(13/04/2015) Estos resultados que están por encima de sus objetivos en materia de protección del clima y de las propias exigencias y compromisos de la Confederación Helvética, se deben en buena medida a la utilización de energías renovables y a las medidas tomadas para reforzar la eficiencia energética.

En el marco de su estrategia de protección del clima 2009, los Ferrocarriles Suizos se fijaron como objetivo reducir hasta 2020 las emisiones de dióxido de carbono en un 30 por ciento respecto a las registradas en 1990.

Medidas

En objetivo se ha superado ya en 2014 gracias a la utilización para la tracción de un 90 por ciento de energía hidráulica, por la mayor participación de otras energías renovables (Ver noticia) y por la mayor eficiencia energética conseguida en los edificios y en los vehículos de tracción diésel. En paralelo al de protección del clima SBB/CFF tienen marcha otro plan de eficiencia energética que tiene como objetivo ahorrar un 20 por ciento en 2015.

Además de todo ello, los Ferrocarriles Suizos aportan una reducción anual de cinco millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono, lo que representa el 10 por ciento de las emisiones de todo el país, gracias a sus soluciones de transporte ecológico y por el tráfico que elimina de las carreteras.